Contra el mal de ojo

Mi otro blog inicia así. Junto a otros textos, propios y ajenos, reposaba en un viejo cuaderno archivado, sobreviviente a mudanzas varias. Rescatado por Malena R. en épocas comunes de  twitter incipiente al grito de «¡sos vos! ¡Desde la adolescencia me sé una poesía tuya!». Sí. El universo reserva estas sorpresas y complicidades.  Un ejemplo más de sinergia y sincronía.

Desconcierto

En esta biografía de tiempos que se acaban,
si te escribo a vos, es por costumbre,
que tu dolor no es un dolor que bien se sufre
ni mis dudas tan inciertas, ni tan blandas.
Yo de vos, me aparto cuando niego
y me paro en esa línea que separa tu hoy de mi hoy,
y no hay murallas,
y es extraño:
a vos te inquieta, a mí me calma.
Son horas pesadas las que brotan
en un tema sin fin que no se agota
y surge porque sí, entre las notas
de las manos que busco y las que aparto.
Es la historia que forjo cuando callo;
es la histeria, con su camino de ida y vuelta.
Es mi voz, potente cuando no hablo
y los sonidos del silencio que atormentan.
No sé si sabrás, como sé ahora:
que saber, a lo mejor, es desconcierto;
que melancolía es angustia, pero suave;
que hoy es ayer de algún mañana
que la muerte es la nada de algún nadie.
… Y los mil rostros de vos, se están riendo
cuando enjaulo mi locura en una cárcel.
Ya no sos inspiración ni desencuentro,
sos lágrima y sos noche y sos pasado.

(publicado en la vieja Revista 13/20 semana del 25 al 31 de agosto de 1989)

De fondo se escucha esta mezcla de metal progresivo, metal sinfónico, metal gótico (como rezan etiquetas varias que uso pero no me adjudico). Épica, como Delain, Nightwish, Within Temptation y similares, son bandas europeas que conjugan una voz femenina de mezzo soprano (o soprano) preferentemente con tintes operísitcos y formación clásica con una voz masculina gutural, secundadas por guitarras potentes y melódicas, teclados, base poderosa y secciones de cuerdas.