Cociner@s del mundo uníos. Dispuesta a darle giros inesperados a la literatura de este blog me calzo gorra de chef – de paso gano en altura – y les acerco esta receta en interpretación propia convenientemente testeada entre los miembros de la familia sin que su salud se viese alterada. Ahí andan de lo más rozagantes y pidiendo bis.
Pan de Carne alla Vero
Ingredientes (para 5 panes de carne tamaño budín navideño)
– 2 kgs. de carne picada especial (evitar la común por el exceso de grasa)
– 1 kg de zanahoria (tip importante: la cantidad de zanahoria debe ser la mitad de la carne. Por lo tanto si se desea menos cantidad de panes resulta fácil hacer la cuenta)
– 3 o 4 cebollas medianas (o 3 grandes, déjese llevar por su alma cocinera)
– Morrón (menos de uno)
– 3 o 4 huevos (dependerá de lo que “pida la preparación»)
– Pan rallado (menos de medio paquete si es de las que compra. Evitar a troche y moche el rebozador que viene con un millón de aditivos. Cómprese una bolsita de pan de cuarto o medio en la panadería de su barrio)
– Sal, pimienta blanca, nuez moscada (puede reemplazarse la nuez moscada por condimento para carnes rojas pero el entusiasmo en su uso puede matar otros sabores. Compre nuez moscada y ráyela en el momento. Se reencontrará con aromas de infancia. Bué, así funciona en mi caso)
– Aceite
Preparación:
1 – Pique la cebolla (o sea, en cuadraditos pequeños, NO en aros. La idea es que aporte sabor, y no encontrarnos con un “cacho” del vegetal elemento. Del mismo modo procédase con el morrón. Reitero: evite las tiras. Dígale sí a los cuadrados pequeños. La cantidad de morrón a usar será un cuarto del de cebolla. Haga un montoncito y calcule).
2 – Rehogar las verdurillas en sartén u olla hasta que la cebolla presente un aspecto cristalino (transparente es LA palabra), durante la cocción, condimente con sal y pimienta. No abuse del aceite mas no lo mezquine. Una vez logrado el punto, reserve quitando del fuego (si se siente gourmet cocine agregando un chorrito – chiquito – de vino blanco de alguna botella que haya quedado abierta)
3 – Mientras la preparación anterior se enfría proceda a rallar las zanahorias. Nuevamente evitar los filos o cuchillas que nos dan como resultado “tiritas” de distinto grosor. Prefiera el artesanal rallador (es lo que hago, además porque la zanahoria no pierde tanta humectación) . La idea es obtener zanahoria en pedacitos o láminas tan pequeños que parezcan copos.
4 – En un bol colocar la carne picada ahuecando al medio, agregar la zanahoria, sal, 2 cucharadas de aceite y comenzar a unir con las manos, en movimiento envolvente de afuera hacia adentro del bol. Las manos le quedarán asquerosamente pegajosas. No se rinda. Vuelva a ahuecar la preparación y agregue los huevos. (A romperlos en otro lado. No vaya a ser cosa que el último esté feo y haya que tirar todo). Agregue sal y pimienta. Mezcle con las manos de la forma en que se indicó. Ahueque nuevamente. En el centro del volcán que armó vierta sin temores: la cebolla, el morrón y el aceite que haya quedado como fondo de cocción (siempre y cuando estén de tibios a fríos. La idea es que NO se cocinen los ingredientes en el bol. En especial los huevos). Este es EL momento de agregar la nuez moscada. Espolvoree pan rallado y amase nuevamente. El pan rallado se va agregando de a poco conforme se indica a continuación
5 – El punto del “amasado” se obtiene cuando la mezcla (intente que sea homogénea) no se pega en las manos. Se va logrando con amasado y agregado de:
a) para humectar: un huevo extra (no exceder los 4) o aceite
b) para secar: pan rallado (se puede reemplazar una parte por un sobrecito de queso rallado pero hay que tener en cuenta que se debe disminuir la cantidad de sal)
6 – El secreto de este pan de carne es que no se vuelve duro por la proporción de zanahorias que contiene. Ahora, si abusamos del pan rallado, no habrá zanahoria que valga!
7 – Lubricar una asadera para horno. Hágame el favor de usar aceite. Un chorrito y desparrama. (No intente hacerlo con el spray vegetal porque es un fracaso). Retire el excedente. Suelo usar una pizzera por varias razones, requiere de menos aceite y la comida no se “pega”. No se me ocurrió intentar en una pirex, por ejemplo (aunque podría ser). El punto es que, para la cantidad de preparación, el tamaño pizzera sirve.
8 – Tome 1/5 de la preparación (debe estar compacta y no desgranarse ese es el punto indicado en 5) y forme un rectángulo como si fuese un budín. Debe tener una forma pareja para poder cortarlo en rodajas. Proceda del mismo modo 4 veces más. Entre pan y pan deje una separación de 1,5 cm
9 – Cocine en horno moderado previamente calentado. Lo mío es a ojo y depende del horno pero debería cocinarse entre 20-30 minutos.
10 – Dejar enfriar antes de servir en rodajas (Mmmm Ñam ñam)