El temor de irse es el miedo a no volver – Foto: Ignacio Sanz
Meto la mano en la herida.
Hurgo en el bolsillo
y corroboro
las ausencias.
Faltan
la llave y tu recuerdo
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El temor de irse es el miedo a no volver – Foto: Ignacio Sanz
Meto la mano en la herida.
Hurgo en el bolsillo
y corroboro
las ausencias.
Faltan
la llave y tu recuerdo
Web de Vero B 
Me encanta… 🙂
Corto, como el tiempo en que se rasga la piel o el corazón.
Profundo, como una herida.
Fuerte, como el dolor …
Saludos desde Ecuador… 😀
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Tengo dos cosas para acotar. Si te ha parecido todo «eso»:
1) hice magia
2) eres poeta 🙂
Saludos desde Argentina 🙂
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🙂
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Intenso, como la ausencia o el dolor.
Besos de los que suavizan heridas, Vero…
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…Y la tristeza omnipresente. Esos besos suavizan, María y vuelven redoblados a su origen.
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¡Cuántas veces hacemos eso! Pero a pesar de la frecuencia no lo solemos expresar tan bien como tú. Genial, Vero.
Como dicen, intenso…complejo, denso pese a su brevedad.
Un beso.
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Más complejo de lo que parece. 😉
Besos, Gema.
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Pero eres muy, muy, muy, muy buena para hacerlo y que incluso parezca sencillo.
Besos.
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Lo que más duele es la llave… Lo siento por mi comentario humorístico.
Pausa.
Afortunada asociación: Herida/bolsilllo… y no es un comentario humorístico.
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Siempre me haces sonreír Josep. 🙂
Tras la pausa… Siempre asocio herida con bolsillo. Quizá porque pienso que en el fondo tendemos a agrandarlas (o no permitimos que cierren) cuando colocamos «cosas» en ellas.
Besos.
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¡Rápido e intenso!
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Tal como deben quitarse las vendas. 😉
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Perfecta asociación, y breve; doblemente bueno.
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🙂
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Ni llave ni recuerdo. Aguja e hilo de sutura, o grapitas bien alineadas para que la cicatriz no se note a ser posible, aunque sí lo suficiente para que otros dedos o labios sepan leerla, leerte. Un beso impregnado con el bálsamo de Fierabrás.
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Como buena mujer moderna que sabe abrir la puerta para ir a jugar optaré por las grapas, Madame. Y lo demás… bueno… Puertas que se abren, heridas que se cierran.
Un beso cálido de verano incipiente.
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La llave, el recuerdo que persiste… No hay acto de clausura.
Un abrazo V,.. muy bueno. Aquileana 😀
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No es casual… no es casual… 😉
Aquí, entre nos, no vale la pena ni el acto ni la clausura. 😛
Un beso, A. 🙂
V.
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Bello, bello, Verónica, hay ausencias más poderosas que las presencias por su significado.
Un abrazo, desde casa.
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Tangencialmente, mire Ud., le comenté de alguna ausencia/presencia.
Un beso que se alegra.
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Es cierto, alguna ausencia lacónica en cuanto a los lugares que visita, verdad’
Un beso de consuelo.
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La llave y tu recuerdo … ¿Contradictorio? – No me hagas caso, Verónica, ya sabes, como decía la Matute: «La cabeza me funciona: la tengo tan mal como siempre»
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Humanos y contradictorios, Enrique; esas son las materias que nos componen. ¿Merecerían ser sinónimos?
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Sin duda, Verónica, sin duda.
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Ah, that missing key! I can hear the breaking of the heart now…
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Una de las pocas piezas de nuestro cuerpo que se rompe y recompone una y otra vez, Christy.
Hugs. 🙂
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Lindo y profundo.
Me gusta 😉
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🙂
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