¿Qué haré con mis ideas tirabuzón?
Me impregnas de bucles
en rizos que me trepan
en pedacitos,
esos pequeños trozos
como anclas.
Por mi libertad
recogeré unos fragmentos
de honestidad.
A tus deudas,
las perdono en previsiones;
esas cuentas de quien espera,
pero no demasiado.
Cuando me salve
libraré todos los cheques
y cubriré todos los rojos
de las corrientes y de las cuentas
en promesa y lujuria
del garante de mi esquina.
Me cultiva el desconsuelo
en esos ojos.